Chocolate y menta en la barandilla de los versos que caen,
se diluye la mente en el compás del humo seco,
y se agrieta la tarde de soledades muriendo.
Chocolate en la espera excitante del amante imaginado,
y la menta en tus pupilas de sabor agridulce.
Deleite en el sólido instante hecho de tu imagen,
aunque sea sólo en pensamiento abnegado.
Chocolate y menta en la puerta de lo besos que barren,
se destila la espera en la cadencia del aire prometido,
y se arruga el abrazo contra tu mandíbula desierta.
Chocolate y menta, menta y chocolate y otra vez tu boca,
deshojando mi herida,
despojando mi tiempo de sabores malditos.
La tableta de lo oscuro y el humo prohibido,
mezcla de recuerdos de aromático verde mintiendo,
pues tu menta es más romero que albahaca,
es más engaño,
como ternura amarga.
Zaíno el humor de esta luz que desgasta,
en penumbras, sabor meditando lo ambiguo,
borrador de un abismo de mi cuerpo a tu sombra,
y el salitre de tu marcha,
cicatriz de hojalata que habla.
Mientras me saborea la demora del emigrante crepúsculo.
Menta y chocolate, compañía en el destierro de tu frío suelo,
como loza en añicos tu silencio rompiente,
mis caricias en insomnio que a duelo me reclaman.
Menta y chocolate,
consuelo de placeres que se agotan y fracasan,
como se equivocan las manos al despiste de un beso extraño.
Me queda el chocolate de lo dulce consumido.
Me queda la menta de lo fresco nacido en tu aliento.
Se nota que para la construcción de este hermoso poema hubo grandes dosis de gozo, como una niña armando piezas metafóricas de un lego. Una incursión que palpa cada rincón del sentimiento para quitar obstáculos al fluir y ritmo de la pasión. Un mapeo minucioso con toda la desnudez y pies descalzos de mujer sintiente y doliente hacia el interior para reconocer fortalezas y debilidades, "luces y sombras". Un "ecce femme" que se crucifica en atmósferas, sabores, olores y mitiga su sed en la distancia del beso para renovar la carne, el sexo y el corazón expectante. Una verdadera catarsis cómplice del verso en trance que otea la luz de la sanación y la pureza.
ResponderEliminarFelicito a la poeta por este alcance y deseo que repace este ejercicio con fruición hasta que se vuelva estilo, hasta que la estructura, técnica y materia no sean más que un peldaño hacia esa dimensión donde la luz disuelve las cúspides y la diafanidad del aire.
Un abrazo a profundidad como jamás nunca lo hayas sentido!!!
Hola mi querido amigo, muchísimas gracias por tus palabras. Tú sí que eres un poeta!! Últimamente estoy profundizando con más cuidado sobre lo que escribo, concretamente en la poesía, y como bien dices trato de ejercitar "un estilo". Cuento con tu andar junto al mío en esta aventura, un nuevo camino que estoy experimentando, eres invitado de honor en mi época de cambios. Me quedo con ese profundo abrazo, saboreándolo como a la menta y el chocolate. Y sí, siento tu abrazo como una vuelta a casa.
EliminarVeo que por fin te has hecho poetisa, la verdad es que no se te da nada mal.
ResponderEliminarHace tiempo que no nos visitams, espero que e este nuevo año lo hagamos más.
Consuelo de placeres, ¿qué placeres?, juegas con el chocolate y con la menta, en esta poesía usas estos dos elementos, epro ¿cómo los usas?, para descifrarlo hay que leerla muy lentamente y así descubrir lo que encierras en ella.
Besos, hasta pronto querida amiga
Hola, mi querida Demófila, gracias por tu comentario y tu visita, siempre esperada y querida en "mi hogar virtual". Espero que la entrada en el nuevo año esté siendo todo lo buena que tú especialmente mereces.
EliminarCon respecto a tu pregunta, mi poema busca más despertar sensaciones, aromas, sabores... El chocolate es un excitante, como la menta, pero el chocolate es dulce y la menta viene por lo de los cigarrillos mentolados, que son el tipo de cigarrillos que fumo. Me gustó esa mezcla para describir ciertas sensaciones. ¿Qué placeres? Pues todos los que puedas imaginar... A veces, cuando no podemos acceder a un determinado placer, podemos sustituirlo creando otras sensaciones igual de agradables. A veces desearía estar en compañía de amigos, disfrutando de una buena charla en torno a un buen vino (esto es un ejemplo de placer), pues si en ese momento estoy sola y no es posible esa compañía anhelada, entonces salgo al balcón, me preparo un té con aroma a chocolate y fumo un cigarrillo mentolado, parece entonces que ese placer se sustituye por otro. Y así con muchas otras tantas cosas. Gracias por tu interés y tu detenida lectora, un placer tenerte siempre por aquí, como ese chocolate y esa menta refrescante. Un abrazo
ufff...se me ocurren muchas fantasias, jejej...pero bueno siempre queda algo como menta y chocolate...vos Nati nos das ideas, besos amiga!
ResponderEliminarHola Natalia, muchas veces me meto en tu blog para ver si has escrito algo nuevo y para seguirte un poquito, ya que hace tiempito que no tenemos el tiempo necesario o disponible para ponernos un poquito al día. Y siempre, siempre que abro tu blog, siempre recibo un soplo de sensaciones y sentimientos con las bellas palabras que escribes (precioso poema) y porque durante esos instantes me siento conmigo sola y recuerdo muchas de nuestras experiencias vividas y me entra la nostalgia, ya no de recordar lo que vivimos, pues hubo mucho gozo en ello, sino nostalgia por no tenerte más presente en mi vida. Te leo y siento cuanto me gustaría tener más cerquita a esta amiga tan sensible y llena de sentimientos para dar y entregar. Tus palabras me conmueven el alma y añoro un abrazo que pueda calmarme así como unas cervezas para ponernos un poco al día. Pero sobre todo añoro tu persona, mi torbellino vital y sentimental, con luces y sombras, y que nunca nunca me deja indiferente. Te quiero mucho preciosa, sean cuantos sean los kilómetros que nos separan y sea cual sea el contacto que nos una en nuestras diferentes épocas. Gracias por tus entradas en este blog porque a los que estamos lejos haces que nos podamos sentir más cerquita de tí y de tu ser. Te mando un abrazo enorme, inmenso, que te envuelva y te proteja y a la vez te colme de tanto cariño que te haga mostrar una sonrisa en tu rostro.
ResponderEliminarChocolate y menta. Buena combinación para saborear junto a tus versos.
ResponderEliminarSaludos
Hola Natalia, muchas veces me meto en tu blog para ver si has escrito algo nuevo y para seguirte un poquito, ya que hace tiempito que no tenemos el tiempo necesario o disponible para ponernos un poquito al día. Y siempre, siempre que abro tu blog, siempre recibo un soplo de sensaciones y sentimientos con las bellas palabras que escribes (precioso poema) y porque durante esos instantes me siento conmigo sola y recuerdo muchas de nuestras experiencias vividas y me entra la nostalgia, ya no de recordar lo que vivimos, pues hubo mucho gozo en ello, sino nostalgia por no tenerte más presente en mi vida. Te leo y siento cuanto me gustaría tener más cerquita a esta amiga tan sensible y llena de sentimientos para dar y entregar. Tus palabras me conmueven el alma y añoro un abrazo que pueda calmarme así como unas cervezas para ponernos un poco al día. Pero sobre todo añoro tu persona, mi torbellino vital y sentimental, con luces y sombras pero que nunca nunca me deja indiferente. Te quiero mucho preciosa, sean cuantos sean los kilómetros que nos separan y sea cual sea el contacto que nos una en nuestras diferentes épocas. Gracias por tus entradas en este blog porque a los que estamos lejos haces que nos podamos sentir más cerquita de tí y de tu ser. Te mando un abrazo enorme, inmenso, que te envuelva y te proteja y a la vez te colme de tanto cariño que te haga mostrar una sonrisa en tu rostro.
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