Empiezo a escribir y ni si quiera sé cuáles son las palabras que acuden a mi mente, pues ahora has ocupado mi pensamiento y es extraño, invasivo, ofende mi sentido común. Me enfado conmigo misma por saber que he de irme pero mi sombra siempre se aferra a una última vez. Sí, reconozco el bloqueo, el placaje, el derechazo directo a mi alma cuando menos lo esperaba, ¿y ahora qué? No me sirven los tópicos, ni los consejos, ni verte o no verte, porque el desierto se ha hecho grande tras cada grano de arena.
Ahora sólo me queda ver el paso del tiempo en el reloj de mi espera mientras decido si desaparecer sin más aunque mis días se queden sin postre por un tiempo, o quedarme a tu lado hasta que deje de doler, como si eso fuera una opción.
Date tiempo... probablemente solo estes cansada.
ResponderEliminarBueno habra q arriesgarse de eso se trata, y el enojo...q temita...este no te deja avanzar por ello no es bueno criticarse tanto, pero aca pareceria q hay un punto de inflexion ...pronto leeremos la desicion...jeje muchos besitos
ResponderEliminarMis dos psicólogos virtuales!!! jejejeeje, pero sobre todo, amigos blogueros. Gracias por leerme, entenderme y escribirme.
ResponderEliminarIntenta escribir, amiga, delante de un cercano ventilador en marcha, en posición fija ante el rostro, quedarán desprendidos los pensamientos y acelerarás su marcha. Tú tan fresquita, que sea él quien venga a apagarlo si quiere...
ResponderEliminarEl ventilador se llevará la arena y espantará moscas. Habrá que tomarlo así.
Un beso.
Entre luces brillantes mi hermano ha encontrado la paz y yo el consuelo con los buenos ánimos que me has dado tú y los demás blogueros.¡Qué grande este nuestro mundillo!El me dice en lo más intimo de mi ser : Si me quieres, no llores"."Estoy en el mejor lugar posible de felicidad". Por si te sirve de algo, yo me estoy recuperando casi al 100% del ictus de hace dos años y tres meses.Vivo plenamente el momento que me ha tocado. Siendo consciente que debo superarme y que tengas en consideracón que todo debe de partir de tí. No te despistes y sigue en la brecha. ¡Saldrás,saldrás! ¡Ánimo,energía, empuje, brío, coraje, VOLUNTAD,espíritu!!! Aquí estamos por si podemos echarte una mano. Besos y un calidísimo abrazo que pueda animarte."
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Diádoco. Tienes razón, este mundillo es muy grande y nos da la oportunidad de crear lazos especiales con esos "desconocidos" del otro lado de la pantalla, pero que a la vez llegan a lo más profundo de nuestros pensamientos y emociones a través de lo que escribimos, de todo eso que nos sale directamente del alma.
ResponderEliminarAlgo me dice que efectivamente tu hermano, desde donde esté te cuida y protege, y también algo me dice que no querría que reprimieras tus sentimientos, pues llorar es una forma de expresar el dolor que de forma natural está presente en estos momentos, y a través de esa expresión se libera la pena para que detrás de ésta, poco a poco y con el tiempo, aparezca de nuevo la alegría, sobre todo esa alegría de saberte afortunado de haber vivido y compartido tantas cosas enriquecedoras junto a tu ser querido que siempre permanecerá vivo en ti y en tu amor por él.
Te mando un fortísimo abrazo, mi fuerza y la certeza de que este gran dolor se irá mitigando.
Yo esty igual hermosa! El dolor como dices se desvanece pero mientras tanto, duele y derrite!
ResponderEliminarUn beso, estoy aquí.
Yo me sequé Nakrama, literalmente sequé la pluma y no hice nada, ni escrinir pude... apun estoy indecisa, pero más fortalecida.
ResponderEliminarEsperemos que todo pase... andamos en el mismo canal.
Abrazos muchos y un beso.
Gabrielle, ¿sabes una cosa? He vuelto a releer esta entrada. Sólo tiene un par de semanas, y recuerdo que en el momento en que la escribí estaba rota. Ahora sé que me sentí de esa manera,y aunque quedan "rescoldos", no puedo rememorar la emoción con la misma intensidad ¡y sólo han pasado unos días!
ResponderEliminarTenemos que tener paciencia para dejarnos secar, como dices en tu comentario,pero necesitamos más paciencia aún para volver a florecer. Ya estás más fortalecida, eso es señal que vas por buen camino. Muchos abrazos para ti tambien.
El tiempo es el mejor amigo para curar las heridas.
ResponderEliminarBonito blog, me quedo entre tus palabras.
Besos.
Reconozco esa sensación, creo que esa sensación de tener las manos limpias, y no ver ni siquiera una mancha de tinta... es necesaria para valorar los momentos en que estamos de tinta hasta los codos.
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