jueves, 2 de junio de 2011

TU LUGAR SEGURO EN EL MUNDO

Busca tu lugar seguro en el mundo. Puede ser fuera o puede ser dentro. Sólo está esperando a que le des la forma que tú necesites. Busca ese espacio que reconforte tu alma, que ponga un verdadero suelo bajo tus pies, donde puedas respirar, ser libre, ser tú.
Tráelo a tu mente cuando estés lejos. Entra en él incluso cuando estés a kilómetros de distancia de ti mismo. En ese momento es cuando más lo necesitas. Escoge tu propia sala de espera del mundo y acondiciónala con lo que te dicte el corazón. Crea el ambiente apropiado y desoye las voces que te impiden conseguir cualquier propósito. Eres fuerte. Cruza la puerta y ciérrala tras de ti.
Busca tu lugar seguro y no salgas hasta que haya amanecer en tu conciencia. Apaga las luces de neón y enciende velas, pequeñas llamas que den calor y claridad a tus pensamientos.
No compitas con el resto de locos. No entres en discusiones sin sentido. Usa tu inteligencia y, cuando al fin estés preparado para abrir los ojos, busca un espejo. Habrás encontrado tu lugar seguro en el mundo.